viernes, 5 de enero de 2018


Basófilo
Los basófilos conforman el tipo de leucocito menos abundante en la sangre. Tiene núcleo irregular, difícil de ver por la granulación basófila que lo cubre casi siempre. Tamaño semejante al de los segmentados. Se denomina basófilo a cualquier célula que se tiñe fácilmente con colorantes básicos (hematoxilina principalmente).
Estos son leucocitos circulantes derivados de médula ósea. Son células mononucleares con un alto contenido granular. Su diferenciación a partir de progenitores mieloides está mediada por IL-3. Ésta actúa sobre la cadena α del receptor para IL-3 (también conocido como CD123), lo que permite distinguirlos de los mastocitos.
Son células de unos 10 μm de diámetro y su núcleo tiene una forma que recuerda a una S,es lobulado y se divide de 1 a 3 lóbulos. Se originan en el mismo lugar que el resto de los granulocitos (médula ósea), y son los menos numerosos, ya que constituyen solo el 0,5 % del total.1​ Son muy parecidos a los mastocitos o células cebadas, pero no son el mismo tipo celular, ni se diferencian a ellos.
Tienen una activa participación en la respuesta inmunitaria, a través de la liberación de histamina, serotonina en bajas concentraciones, y otras sustancias químicas, además tiene gránulos de dos clases:
Gránulos azurófilos: Contienen lisosomas, que a su vez estos contienen hidrolasas ácidas.
Gránulos específicos o secundarios: contienen histamina (vasodilatador), heparán sulfato (vasodilatador), heparina (anticoagulante) y leucotrienos (hacen contraer el músculo liso de las vías aéreas).
Los basófilos además de poseer gránulos en su interior poseen receptores de IgE (inmunoglobulina E), aquella inmunoglobulina relacionada con las alergias. Por eso el basófilo participa en la respuesta inflamatoria.
Los basófilos constituyen menos del 1% de los leucocitos en humanos, pero son las únicas células circulantes que contienen histamina, estos comparten muchas similitudes con los mastocitos residentes en los tejidos, activándose cuando se produce entrecruzamiento del antígeno con el receptor FcεRI de IgE.
El entrecruzamiento provoca la rápida degranulación y liberación del contenido intracelular. Los basófilos también pueden activarse sin la presencia de IgE, gracias a mediadores inflamatorios como los factores del complemento (C5a y C3a), MBP, PAF y quimiocinas.
Los basófilos son reclutados a los sitios de inflamación donde pueden ser activados directamente por una variedad de patrones moleculares asociados a patógenos (o PAMPs, por sus siglas en inglés), así como por entrecruzamiento de IgE.
 Cuando son estimulados, liberan su contenido granular conteniendo histamina y producen LTC4 (leucotrieno 4). Además, también son capaces de producir citocinas, principalmente IL-4 e IL-13, así como MIP-1α. Por lo tanto, estas células ayudan al sistema inmunitario a través de la liberación de distintos componentes tales como citocinas, leucotrienos e histamina. En particular, los basófilos son realmente importantes en respuestas inmunitarias frente a parásitos, incluyendo garrapatas y filarias.
Los basófilos ya han sido implicados en la patogénesis de la enfermedad alérgica, ya que se han encontrado niveles altos de los mediadores que ambos producen en tejidos afectados por la alergia. Los basófilos son la fuente principal de producción de IL-4 en las respuestas inmunitarias iniciales, una citocina que promueve la diferenciación de las células T hacia un fenotipo Th2. Además, una vez que el antígeno ha entrado en el organismo, estas células pueden rápidamente ser reclutadas a piel, pulmón o mucosa nasal, por lo que se encuentran elevados en dermatitis atópica, asma, rinitis alérgica y pólipos nasales.

Esquema básico con los linajes de los diferentes tipos celulares que se pueden observar en la sangre. Las células progenitoras se encuentran en la médula ósea y los mastocitos y los macrófagos se encuentran en los tejidos conectivos.


Bibliografía
Davoine F, Lacy P. 2014. Eosinophil cytokines, chemokines, and growth factors: emerging roles in immunity. Frontiers in immunology 10. doi:10.3389/fimmu.2014.00570. 
Muniz VS, Weller PF, Neves JS. 2012. Eosinophil crystalloid granules: structure, function, and beyond. J Leukoc Biol. 92:281-288.
Padigel UM, Nolan TJ, Schad GA, Abraham D. 2006. Eosinophils can function as antigen-presenting cells to induce primary and secondary immune responses to Strongyloides stercoralis. Infection and immunity. 74(6): 3232–3238. 
Rothenberg ME, Hogan SP. 2006. The eosinophil. Annual review of immunology. 6. 24:147-174.